Cuando el cabello está mojado, se vuelve más frágil y quebradizo que de costumbre, por lo que, cuando lo desenredes, comienza siempre por las puntas y poco a poco, ve cepillando hasta la raíz.
Te recomendamos desenredarlo en seco antes del lavado o antes de dormir, excepto si tienes el cabello rizado. En este caso, con el cabello húmedo utiliza un peine de madera y púas grandes para definir mejor el rizo.